He aquí mi Currículum Vitae.
Lo elaboré siguiendo principalmente dos pasos: en el primero, hice la composición y el encaje de los elementos con tablas en Microsoft Word; y en el segundo, le di la forma y el acabado con AutoCAD y Adobe Illustrator.
Cuando estaba finalizando mis estudios de Gestión Administrativa, habiendo recibido ya cierta orientación al respecto, empecé a prepararme para iniciar la búsqueda de empleo a un nivel mucho más serio y exhaustivo. Como parte del proceso, me propuse hacer un currículum que destacara entre los demás, pues ya me habían advertido de que habría mucha competencia y, siendo solo uno entre muchos, en algunos casos podría no llegar ni a ser leído. Por lo tanto, decidí currarme su diseño para que resultara llamativo.
Quedé bastante contento con el resultado, que puedes ver al principio de esta entrada. Habrá a quien no guste, por supuesto, pero de lo que no cabe duda es que también habrá a quien sí, porque gracias a él conseguí mi actual empleo.
En marzo de 2016, cuando me entrevisté con uno de mis actuales jefes, éste me dijo que normalmente no miraba los currículums que recibía y directamente los tiraba a la basura, pero que el mío tenía algo, no sabía el qué, que le había hecho conservarlo. Yo sí lo sé: el diseño.
Dicho esto, debe quedar claro que, soy consciente, el diseño de un currículum puede ser muy efectivo como primera llamada de atención, pero obviamente no garantiza el éxito en el proceso de selección. Para eso es necesario también un contenido valioso, y por eso pongo todo mi empeño en perfeccionar mi contenido y en darlo a conocer. Ese último es el objetivo de este blog.
Lo elaboré siguiendo principalmente dos pasos: en el primero, hice la composición y el encaje de los elementos con tablas en Microsoft Word; y en el segundo, le di la forma y el acabado con AutoCAD y Adobe Illustrator.
Cuando estaba finalizando mis estudios de Gestión Administrativa, habiendo recibido ya cierta orientación al respecto, empecé a prepararme para iniciar la búsqueda de empleo a un nivel mucho más serio y exhaustivo. Como parte del proceso, me propuse hacer un currículum que destacara entre los demás, pues ya me habían advertido de que habría mucha competencia y, siendo solo uno entre muchos, en algunos casos podría no llegar ni a ser leído. Por lo tanto, decidí currarme su diseño para que resultara llamativo.
Quedé bastante contento con el resultado, que puedes ver al principio de esta entrada. Habrá a quien no guste, por supuesto, pero de lo que no cabe duda es que también habrá a quien sí, porque gracias a él conseguí mi actual empleo.
En marzo de 2016, cuando me entrevisté con uno de mis actuales jefes, éste me dijo que normalmente no miraba los currículums que recibía y directamente los tiraba a la basura, pero que el mío tenía algo, no sabía el qué, que le había hecho conservarlo. Yo sí lo sé: el diseño.
Dicho esto, debe quedar claro que, soy consciente, el diseño de un currículum puede ser muy efectivo como primera llamada de atención, pero obviamente no garantiza el éxito en el proceso de selección. Para eso es necesario también un contenido valioso, y por eso pongo todo mi empeño en perfeccionar mi contenido y en darlo a conocer. Ese último es el objetivo de este blog.
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